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Capítulo 27 - Contratos de licencias y mantenimiento de software

27.6 Propiedad intelectual (P.I.) y titularidad

27.6.2 Patentes

Una patente sirve como un contrato entre la sociedad y un inventor individual. En virtud de los términos de este contrato, el inventor tiene el derecho exclusivo de impedir que otros fabriquen, utilicen y vendan una invención patentada durante un período de tiempo determinado -normalmente de hasta 20 años- a cambio de que el inventor divulgue al público los detalles de la invención.

Muchos productos y tecnologías no existirían sin la protección de las patentes, especialmente aquellos que requieren inversiones sustanciales. Sin embargo, una vez que estos productos están disponibles en el mercado, pueden ser fácilmente duplicados por los competidores. Cuando no se dispone de patentes, la tecnología se mantiene en secreto. Los titulares de patentes pueden excluir a otros de la fabricación, el uso o la venta de su invención o creación.

Las patentes no son fáciles de obtener. Los derechos de patente no se conceden para ideas vagas, sino para reivindicaciones cuidadosamente adaptadas. Para evitar proteger la tecnología que ya está disponible, o que está al alcance de la gente común, esas afirmaciones son examinadas por expertos. El valor de las reivindicaciones de patentes puede variar tanto como las tecnologías que protegen.

Existen tres tipos de patentes: 1) patentes de utilidad; 2) patentes de diseño; y 3) patentes de plantas. Podrán concederse patentes de utilidad a cualquier proceso nuevo y útil o a su mejora. Una patente de diseño protege el diseño ornamental de un artículo o creación. Se concede una patente de planta para la invención o el descubrimiento de un distrito y una nueva variedad de planta.


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